
Por: Agencia Reforma
Ciudad de México.- Ximena Pichel, conocida como Lady Racista por los insultos que profirió a un agente policiaco y que fueron viralizados en un video, ofreció mediante un comunicado fechado el 6 de julio, pero difundido hoy, “una disculpa pública sincera y sin reservas” por los hechos ocurridos hace unos días en la colonia Condesa.
“Quiero ofrecer una disculpa pública, sincera y sin reservas. Mis palabras ofendieron a un hombre que hacía su trabajo y también a muchas personas que, cada día, enfrentan la discriminación y el desprecio. Lo lamento de corazón”, dice la modelo de nacionalidad argentina, pero avecindada en México desde hace varios años.
“Soy plenamente consciente de la gravedad de mis palabras y sé que lo que dije estuvo mal. No hay justificación para expresiones que hieren, dividen y discriminan. Fue un error que asumo con responsabilidad”, explica Pichel en su comunicado.
La modelo insultó a un agente policiaco que pretendía infraccionarla porque había estacionado su auto indebidamente. Le gritó “pinche negro” y le increpó: “odio a los negros como tú”.
A continuación el comunicado completo:
COMUNICADO A LA SOCIEDAD
Ciudad de México, a 06 julio de 2025.
A todas y todos quienes han visto, leído o escuchado sobre los hechos ocurridos recientemente:
Hoy quiero dirigirme a ustedes desde lo más profundo de mi ser. Soy plenamente consciente de la gravedad de mis palabras y sé que lo que dije estuvo mal. No hay justificación para expresiones que hieren, dividen y discriminan. Fue un error que asumo con responsabilidad.
Quiero ofrecer una disculpa pública sincera y sin reservas. Mis palabras ofendieron a un hombre que hacía su trabajo y también a muchas personas que, cada día, enfrentan la discriminación y el desprecio. Lo lamento de corazón.
Sin embargo, no quiero que este momento defina todo lo que soy. Soy una mujer que cometió un grave error, pero también soy una persona que está dispuesta a aprender, cambiar y ser mejor. Mi propósito es reflexionar profundamente sobre este acto, reparar el daño que he causado y contribuir, desde mi lugar, a construir un país más justo, respetuoso y digno para todas y todos.
No busco compasión ni excusas. Tampoco me tiró al piso. Lo que busco es transformar este momento en un punto de partida para crecer y demostrar que los errores no nos definen si tenemos la voluntad de enmendarlos con acciones reales.
A la persona que ofendí directamente, le pido perdón con honestidad. A quienes se sintieron heridos o decepcionados por mí, también les ofrezco mi disculpa más genuina.
Gracias a quienes, con su voz firme y su indignación justa, me han hecho ver la gravedad de lo ocurrido. Gracias también a quienes, aún con dolor, creen en la capacidad humana de cambio. Hoy inicio este camino con humildad, pero con la frente en alto y la dignidad de quien sabe que es responsable de sus palabras y sus actos.
“Que este momento nos recuerde que no somos nuestras peores palabras, sino lo que hacemos para repararlas”.
Con respeto y verdad.
Ximena Pichel.
DMC